23/10/09

Nostalgia..


Nunca debí volver...
Uno vuelve porque espera encontrar algo, algo que cree que dejó olvidado y luego descubre que lo ha dejado en otra parte o que nunca supo dónde estaba. Uno no debe volver a los sitios donde fue feliz y mucho menos a los lugares donde ha sufrido tanto.
Ahora sé que las avispas han sido necesarias.
Nunca debí volver. No me ha esperado el mar. Ni
las cuatro casas que quedan en pie con los tejados de pizarra
invadidos por el musgo y las raíces de los robles
enganchadas en los zaguanes.
Mi abuela no me ha esperado
ni siquiera en el cementerio. Hace tiempo que sus
huesos fueron desenterrados y arrojados a la fosa común.
Entonces yo era demasiado pequeña para evitarlo.
Todos a los que quise han muerto hace tiempo. A este lugar no
ha llegado el turismo rural ni nadie que repare los baches
de la carretera. El viento sopla hasta el viejo faro que
ya no alumbra. Las gallinas son las únicas que todavía
deambulan por el pueblo, pero hasta ellas parecen perdidas.

Aunque seamos malditas - Eugenia Rico

11/4/09

A pesar de todo




A pesar de que se duermen mis sentidos por rutina.
A pesar de esta apatía que bosteza enmohecida.
A pesar de muchas broncas que quedaron escondidas.

A pesar de mis fracasos, mis pecados, mis caídas.
A pesar ya de ilusiones que están por siempre dormidas,
y de fantasmas internos prendidos de mis pupilas.
A pesar de que me invento muchas veces la sonrisa.

A pesar de que me trague mis verdades, mis mentiras.

A pesar de mis defectos, de mi cólera, de mi ira, de mis eternos miedos que desde mi alma silban, y que viva disfrazando mis pequeñas cobardías.
A pesar de mi pasado que me espía a escondidas.
A pesar de mis angustias que rasguñan mis costillas.
A pesar de mi energía que se agota, se termina, y del paso de los años, de mis luchas, mis heridas.

A pesar de todo eso... sigo apostando a la vida.

Carlos Alberto Boaglio

26/2/09

Te Odio...


Te odio.

Odio tu boca, pues me incita a beber de tus labios aun sin tener sed.

Odio tus ojos, pues tu mirada ilumina mi vida, cual faro ilumina los barcos en noches oscuras.

Odio tus besos, pues son la droga más potente que existe, llegando a crear tal adicción, que una vez probados, resulta imposible prescindir de ellos.

Odio tus manos, pues con el simple hecho de rozarlas con las mías, haces que mi piel se estremezca de placer.

Odio que no te dieras cuenta, que cuando decía no, en realidad quería decir sí.

Odio que no supieras entender, que mis palabras no eran sino una armadura construida con letras sin sentido, cuyo único fin consistía en ocultar las miles de mariposas que revoloteaban en mi estómago cada vez que parabas frente a mí.

Odio cuando decías que me querías, pues me dejaste ir, cuando una simple palabra tuya hubiese bastado para quedarme a tu lado.

Te odio porque no tuviste el valor de luchar hasta el final… Te odio porque tu recuerdo no me deja vivir…


Te odio porque TE QUIERO y no te tengo junto a mí.

19/2/09

Elegir un camino..


A veces es como estar en mitad de alguna parte, no sabes bien qué es, ni dónde está, pero estas ahí. La gente camina apresurada, con paso firme, todos parecen tener claro hacia donde van, en cambio tú, sigues en el mismo lugar, mirando, observando, intentando decidir qué camino es el adecuado… Pero debes ir con cuidado, porque en ese lugar, al igual que en los cuentos, también existe el lobo feroz, el cual siempre está al acecho en cualquier esquina, esperando para engatusarte con sus mentiras; -Ven por aquí caperucita, este camino es mas corto… -No, mejor ven por aquí, el camino es más bonito… -Si vienes conmigo, te mostraré un tesoro escondido… Debes ser precavido a la hora de avanzar, todos te ofrecerán el mejor atajo, todos intentarán convencerte de cuál es la mejor opción, pero no debes fiarte. Quizás sea cierto que el camino es corto, pero puede que al final haya un precipicio, puede que el camino sea el más bonito, pero probablemente también el más peligroso. Y puede ser que existiese un tesoro, pero piensa que tal vez, cuando llegues, sólo encuentres una olla vacía… Y esque, para elegir un camino, no debemos guiarnos por su apariencia, por ser el más largo o el más corto, el más empinado o el más llano, el más concurrido o el más solitario. Sino por lo que deseamos que nos espere al llegar al final. No elijas el camino al mar si quieres ir a la montaña, no elijas el camino soleado si lo que buscas es sombra, no escojas el más concurrido por ser el que todos han escogido, porque si bien es cierto, que harás el viaje acompañado, llegará un día en que ese viaje llegue a su fin, y es entonces cuando te darás cuenta de que no te sirvió de nada tanta compañía, de que no eres feliz, porque no es ahí donde querías llegar. Piensa donde quieres ir y empieza a caminar, oirás voces a lo lejos, debes ignorarlas, conecta el mp3, el mp4 o el ipod nano y continúa tu viaje, pon tus ojos en el final del camino y no te detengas ante nada, verás como al llegar a la meta, al acabar el camino, encontrarás el verdadero tesoro.

Nunca permitas que nadie dirija tu vida, porque cuando lo hagas, simplemente,habrás dejado de vivir.

Perdona que me ria..


Perdona que me ría
Pero tu cara me hace gracia,
Deja de mirarme las tetas
Y mírame a la cara cuando hablas

Si vienes a joderme
Coge de nuevo tus maletas
No me cuentes tu vida
Por que ya no me interesa

Hablas mucho
Pero no dices nada
Palabras sin sentido
Que avivan mi desgana

Te crees el centro del mundo
Y no eres ni la milésima parte
Así que bájate los humos cariño
No te sientas tan importante

No fue culpa mía
Si no viste lo que tenías delante
Cambiaste el mercedes por un seiscientos
Ahora no vengas a reclamarme

Ya no existe esa niña tonta
La que todo te lo perdonaba
Así que déjate de falsas promesas
Porque no te creo nada

¿Que me vas a explicar
Si te pillé en la cama con otra,
Que estabais grabando un documental
Sobre como tocar la flauta con la boca?

Deja que te diga algo
Y espero que no te ofendas,
ójala sea buena en la cama
Por que tú eres una mierda...

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Pequeñas piezas...


A veces pienso que no somos más que pequeñas piezas en un gran tablero de ajedrez, victimas de un juego al que nunca nos invitaron, pero al cual debemos jugar sin elección… Debemos pensar bien cada movimiento, cada jugada, porque como en todo buen juego de estrategia que se precie, la paciencia es una virtud necesaria si queremos sobrevivir. Pero este juego es mucho más complicado, ya que a diferencia del ajedrez tradicional, al empezar a jugar, no nos entregan un librito con las instrucciones, nadie nos dice cuales son las reglas para poder ganar la partida, aquí debemos aprender nosotros solos cómo comer y no ser comidos. Y aunque parezca sencillo no lo es, resulta complicado y más aún para un simple peón, aprender a moverse entre reyes y torres que te miran con recelo, esperando a que cometas el más mínimo fallo para aplastarte sin contemplación alguna… Llegados a este punto, debo confesar que nunca fui buena jugando al ajedrez. Quizás se deba a que, a diferencia de las demás piezas, yo no me muevo por lógica ni por razonamientos, sino por sentimientos, y ya se sabe que en este tipo de juegos, esa no es una opción muy adecuada. La verdad esque siempre he pensado que yo no pertenezco a este juego, creo que en realidad, yo era una pieza del parchís, pero cuando nací se equivocaron de tablero y me pusieron en este por error…Aunque si lo miramos así, no hay mal que por bien no venga, puestos a elegir, prefiero que una torre me mire con recelo a ir por la vida comiéndome una y contándome veinte. En fin, esta visto que aunque las cosas sean difíciles, siempre podrían ser peor, así que creo que lo mejor es avanzar sin miedo, ya que a diferencia de las verdaderas piezas del ajedrez, aunque nos coman una y otra vez, tenemos la suerte de poder levantarnos y seguir adelante. Y en definitiva, si nos paramos a pensarlo, ¿Cuál es el verdadero objetivo de cualquier juego? ¿Ganar? No, eso es sólo una parte, el verdadero objetivo es JUGAR. Así que… Juguemos :)

--A veces me pregunto si realmente somos nosotros los que jugamos la partida, o es la partida la que juega con nosotros…--

Soledad


Debería ser feliz
Al menos eso dicen,
Todo se ve tan claro
Cuando no eres quien lo vive.

La casa tan llena
Y a la vez tan vacía,
Mi voz en el silencio
Gritando de agonía.

Dices que me escuchas
No dudo que lo intentes,
Quizás oyes lo que digo
Pero no lo entiendes.

Y gritas y te enfadas
Cuando afloran los reproches,
Y guardo mis palabras
De nuevo en mi cofre.

Las hago prisioneras
En mi propio castillo,
En la torre más alta,
Donde sólo yo vigilo.

Pero al caer la noche
Cuando el sueño te enreda,
El duende de las lágrimas
En silencio las libera.

Y se deslizan lentamente
Temiendo ser descubiertas,
Recorriendo mis mejillas
Sin apenas darme cuenta.

Mientras el nudo que oprime mi pecho
Entre suspiro y suspiro,
Me recuerda constantemente
Que no es un sueño lo vivido.

Y te miro mientras duermes
Cada noche a mi lado,
Y te sueño mientras vives
Cada vez más alejado.

Es entonces amor mío
Cuando entiendo lo que pasa,
No son culpables las palabras
Cuando el alma se me desgarra.

Sino el dolor de comprender
Que hay un muro que nos separa,
Sentirte tan cerca y a la vez tan lejos
Y saber que no puedo hacer nada…

Evitar lo inevitable..


Quisimos evitar lo inevitable y ese fue nuestro peor error. Debimos dejar que todo siguiera su curso, sin forzar las cosas, sin intentar “Obligarnos”a dar cada vez más, de donde ya no había nada que sacar.

No sé en qué momento se nos acabó el amor, la verdad, no me di cuenta. La rutina se apoderó de nuestras vidas y la pasión fue absorbida por la costumbre, creo que no fue buena idea posponer el final.

-Vamos a intentar que funcione.-Dijiste-. Son tantos años juntos…

En el fondo, ambos sabíamos que no tenía sentido, aun así, seguimos adelante.

Pero todo fue en vano, peleas, insultos, palabras hirientes, cuyos filos estaban a la altura de la más afilada de las katanas.

Los errores del pasado volvían una y otra vez, recordándonos viejas heridas que creíamos cicatrizadas, revolviendo de nuevo el dolor. ¿De verdad crees que valió la pena?
Podríamos habernos evitado tanto daño…Tantas lágrimas innecesarias… ¿Y todo porque? ¿Por miedo a la soledad? ¿Por miedo a empezar desde cero? ¿Por miedo a…? Simplemente por miedo… ¿Pero sabes que?... No se puede vivir con miedo eternamente, antes o después debemos enfrentar la realidad y creo que ha llegado mi momento.

No fue culpa tuya, ni mía, o quizás si, no lo sé… Sólo sé que yo e decidido VIVIR y aquí pongo el fin.

No se puede construir nada sobre cimientos de reproches, antes o después, acabarían cediendo.
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